Pío, pío

En una red social, de cuyo nombre no quiero acordarme, vivía un bizarro caballero adorador de San Andrés y, como una abuelastra pía, le tenía puesto un altarcillo en el que una multitud le sujetábamos las velas. Un cuadro.

Pío, pío por Visi Vidal Gilsanz está licenciado bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivar 4.0 Internacional.